Una tarde de sol (bah, no me acuerdo) del mes de septiembre me dirigí rauda a
Kiehl's a reponer mi amado exfoliante corporal
Creme de Corps de soja y miel.
No había.Para mi colapso, la vendedora me explicó que estaba en falta hacía mucho tiempo y que no, no iba a llegar pronto por no sé qué problemas con la Aduana.
Indignada, amenacé con una sentada frente al Ministerio de Economía y con invadir el despacho de Guillermo Moreno, todo tratando de esquivar el tester del triste sucedáneo que la dependienta (ahhh, creo que abrí este blog sólo para poder emplear esta bonita palabra castiza) me acercaba tercamente a las narices, empecinada en hacerme probar.
Me negué dignamente (soy una mujer fiel, qué se ha creído) hasta que me lo acercó lo suficiente para percibir que tenía aroma a pera.
Pero no cualquier aroma a pera, sino el olor que todas las peras quisieran tener, aroma a pera top model, perfume de pera que te la comés y se va al cielo.
Me lo traje. Así de fácil soy.
Hoy sin embargo, tras casi 2 meses de convivencia, puedo afirmar que no se trató de una simple atracción: es amor.
Su nombre completo es
Gently Exfoliating Body Scrub, viene también en versión coriandro, y no es tan cremoso como el de soja y miel, lo que lo hace ideal para el verano. Se los presento:
Creme de Corps, por cierto, llegó al local pocos días más tarde. Dado mi romance actual con el exfoliante de pera, no guardo rencor. Sólo he decidido extraerle a la vendedora petardista más muestras de shampoo de Argan, una monada de la que hablaré pronto. En realidad, todos los productos de Kiehl's son parejamente excelentes, incluso en cabelleras rebeldes y pieles soliviantadas como las mías. Yo creo que no hago más reviews de la marca porque nunca sé muy bien dónde ponerle la h al nombre.
Y ustedes, ¿Qué exfoliante usan?
PD: Moreno es el secretario de comercio. Que una se olvida que este blog es internacional xD...
Besos!