
Elegir el corrector de ojeras perfecto para cada una no es tarea fácil: dan fe de ello los numerosos mapaches y/u osos panda que circulan a diario por las principales arterias de cada ciudad. Miles de veces escuchamos decir que el corrector es un imprescindible que ilumina la mirada, descansa, abre los ojos y demás etcéteras maravillosos, para toparnos luego con una decepcionante realidad de ojeras grisáceas o mirada de fantasma Gasparín. Aquí, algunos tips para encontrar la felicidad en formato de tubo, pote o lápiz, hijos del maquillar a mucha, mucha gente. Y todos, hasta los frescos como una lechuga, creían tener unas ojeras espantosas.
El corrector de ojeras no tiene que ser del color de la piel: dado que la ojera es más oscura que el resto de la cara, es un mundo aparte. Prueben con por lo menos 1 tono más que el de la base o el corrector que usan para la cara.
El corrector queda bien en todo el párpado para unificar el tono, si no vamos a maquillarlo. Como primer, realmente, no resulta gran cosa. Sí es muy útil, en cambio, para camuflar pelos cejiles que no deberían estar allí.
Huyan, huyan, huyan y vuelvan a huir de los correctores con tintes amarillos. No sé a quién se le ocurrió esa diabólica idea. Los correctores amarillos dejan la piel exactamente así: amarilla. Tienen la notable virtud de no sentarle bien a nadie, de Asia a Africa, De Laponia a Sudamérica y de Retiro a Pilar. Yo directamente eliminaría la totalidad de la línea
NC de
Mac.
Elijan siempre correctores de matices cálidos: salmones o beiges. Son los que verdaderamente ocultan las ojeras y se funden con la piel a la perfección.Y, si hay bolsas, las disimulan en lugar de señalarlas con una flecha de neón. Son así los de la línea
Effacernes, de
Lancôme, los
Dermacolor de
Kryolan y los
NW de
Mac. Un tono anaranjado como el de la foto, aunque no lo parezca, es ideal para camuflar ojeras rebeldes. Prueben y verán:

El corrector se coloca en el ángulo interno del ojo, bajo el lagrimal, que siempre es oscuro, y desde allí se difumina con suaves golpecitos hacia afuera. Nunca se pongan en el ángulo externo del ojo, marca pliegues y líneas (horror) aunque no las haya. Sí conviene colocar sobre el lagrimal, al costado de la nariz, otra zona que siempre es oscura, y, en pequeñísima cantidad, en el exacto rabillo del ojo, un lugar que por alguna extraña razón, siempre es de otro color. O marrón, o colorado. Si tienen el párpado inferior o waterline muy rojizo pueden unificarlo con un poquito de corrector,queda muy lindo y natural. Eso sí: prueben antes si no les arde, molesta o pica. A algunas les (nos) pasa, y a otras, no.
¿Historias de amor/odio con correctores de ojeras? ¡Cuenten!
Nos vemos!
PD: ¡Bienvenida toda la gente nueva! Muy pronto voy a estar pasando por sus blogs, si los tienen. Y si no, sepan que hacen a esta blogger feliz...